El mantener nuestro auto en buen estado no sólo depende de llevarlo a la agencia o a un taller mecánico para que realicen un diagnóstico con scanner automotriz o el mantenimiento frecuente.
Como sabes, también es importante considerar otras circunstancias, desde dónde dejamos estacionado el auto, los hábitos que tenemos al conducirlo, no importa si es estándar o automático, hasta la frecuencia en la que lo lavamos.
Y hablando de esto último, anteriormente ya te habíamos compartido algunas recomendaciones sobre cómo limpiar el motor de tu auto; el día de hoy vamos a volver a abrir el cofre pero para limpiar el sistema de refrigeración de tu vehículo correctamente y evitar que el motor tenga estragos debido a un mal funcionamiento o estado del mismo.
Si te interesa conocer el proceso que conlleva limpiar el sistema de refrigeración para estar al pendiente si lo hacen de manera adecuada, entonces no dejes de leer, sin duda esta información te será de utilidad.
¿Qué es el sistema de refrigeración?
Como sabemos el motor es uno de los principales componentes para que el vehículo funcione, sin embargo, para que éste funcione eficazmente, debe estar a una cierta temperatura. Ni muy frío ni muy caliente.
Pero ¿cómo es posible que el motor se mantenga a una temperatura sin que se sobrecaliente? Es aquí donde entra el sistema de refrigeración.
El sistema de refrigeración de un vehículo es el encargado de enfriar y mantener el motor en la temperatura adecuada para evitar averías o fallas, para ello está el líquido anticongelante y la bomba de agua.
Su funcionamiento es bastante sencillo, la bomba de agua succiona el líquido para mandarlo al interior del motor por los espacios que se encuentran entre la cámara de combustión y las camisas de los pistones, y lo hace circular para que éste se mantenga a una temperatura equilibrada.
¿Cómo limpiar el sistema de refrigeración de tu auto?
Pero como bien sabemos, todos los componentes de nuestro vehículo requieren de limpieza y de vez en cuando de un diagnóstico automotriz para estar seguros de que están en buenas condiciones.
Por ello, a continuación, te mostraremos los pasos para limpiar el sistema de refrigeración y no ocasionar algún daño en tu vehículo que pueda volverse costoso.
1.- Preparar el auto
Lo primero que se debe hacer es dejar enfriar el motor para evitar un choque de temperaturas, después se purga el líquido de refrigeración para limpiar el tanque de expansión.
Si notas que tu tanque de expansión está muy sucio, cámbialo, así como el proceso de desechar el líquido debe hacerse con cuidado para evitar contaminar el medio ambiente.
2.- Se lava el radiador
Una vez que se haya purgado el líquido de refrigeración y el tanque de expansión esté limpio, se pasa a limpiar el radiador.
Primeramente quitaremos las mangueras tanto la superior como la inferior, ésta última se va a limpiar profundamente de abajo hacia arriba y teniendo cerrada la tapa del radiador, mientras que la manguera superior se limpia de arriba hacia abajo hasta que el agua esté limpia y clara.
3.- Se limpia el intercambiador de calor
Una vez que se termine de limpiar las mangueras del radiador es turno de lavar el intercambiador de calor. De nueva cuenta, el agua que se utilice para lavar esta parte del sistema de refrigeración debe salir clara.
En este paso suelen retirarles los sedimentos que puedan existir en el sistema de refrigeración, éstos se forman por la corrosión, cal o restos de silicona que se acumulan con el paso de los años y que pueden ocasionar que el sistema no funcione como debería e incluso pueda dañarse.
En caso de que no sepas las condiciones en las que está el intercambiador de calor acércate a un taller especializado en diagnóstico y que, además, cuente con un scanner automotriz, para que revise si es necesario realizar un lavado del sistema de refrigeración o requieres otro servicio.
4.- Ensamblar el sistema
Finalmente, el último paso es ensamblar todo el sistema de refrigeración y colocar las mangueras, las válvulas y el termostato para que la computadora automotriz tenga regulado el funcionamiento del sistema y notifique cuando algo está mal.
Cuando todo se ensambla es momento de llenar el sistema con el líquido refrigerante para saber cuánta mezcla debe introducirse, para ello es necesario contar con un refractómetro, una vez que esté el líquido hay que quitar el líquido que puede estar en el sistema para que funcione sin que haya alguna fuga o falla.
Ahora que ya conoces cómo se limpia el sistema de refrigeración de tu auto, podrás verificar que lo estén haciendo correctamente la siguiente vez que lo lleves al taller.
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